El solar está asilvestrado, con la vegetación creciendo como le parece, en verde intenso. Un grupo fue a desbrozar el día anterior para que, al menos una parte, estuviera transitable para la celebración. Se inaugura el primer solar de la cooperativa de vivienda Entrepatios.
Todo el mundo hace algo. En una furgoneta traen sillas y mesas de una asociación cercana y de otras asociaciones que están más lejos, hacen una cadena para descargarlas. Varias personas recogen basura (cristales rotos, latas, envases diversos) y parte de los restos vegetales del día anterior. Ponen una cinta roja y blanca que delimita algunos lugares que pueden ser peligrosos para las y los peques. Una chica está subida a una escalera y coloca un toldo azul (se parece a los que había en la puerta del Sol en el 15M). Del otro lado un chico sostiene la cuerda para que esté lo más tensa posible. Las niñas y los niños hacen dibujos con pintura de colores sobre sus manos en una pared que se pintó de blanco. Con trapos y ropa vieja tejen sobre la verja metálica la palabra ENTREPATIOS. Cada cual trae algo de comida para compartir. Hay mucha comida y muy rica. Hacen guirnaldas porque sí, para que esté más bonito. Dos están paradas en una esquina, mirando hacia arriba: aquí estará nuestro salón. Algunas vecinas se acercan, preguntan, les invitan a entrar. Ponen más toldos, para el sol y para la lluvia, no se sabe bien, hace un día raro. Colocan entre muchos brazos el cartel que indica la próxima construcción de viviendas en derecho de uso, ecológicas, sobre un soporte de madera. Hacen un pequeño teatro, una dinámica por grupos, una asamblea. Ríen. Hablan. Las niñas y los niños corren de un lado a otro investigándolo todo.
¡Foto de grupo! Dice alguien. Se apelotonan para que quepa todo el mundo ¡Foto de grupo! Todavía falta más gente, esperad ¡Foto de grupo! Venga, ahora parece que estamos, vamos que los peques ya quieren irse a jugar ¡Eeeeentreeeepaaaatioooooooos!
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